Tener un presupuesto es una de esas cosas que sabes que debes hacer, pero nunca lo logras. Además, esto involucra un montón de hojas de cálculo y aplicaciones intimidantes que a veces hacen parecer que te va tomar más tiempo del necesario. Si realmente quieres tener éxito al hacer tu presupuesto, mantener las cosas simples puede ayudar. Después de todo, si tu plan es demasiado complejo, es más probable que renuncies a él o ni siquiera lo comiences. Para iniciar tu presupuesto sin complicarte, prueba estos consejos rápidos. De esta forma estarás en camino de darle un mejor seguimiento a tu dinero en poco tiempo.
Como primer paso, anota cada transacción que realices en el momento que la hagas. Cuando eres consciente del dinero que estás gastando, es más probable que gastes menos. Tener un registro también es una gran manera de empezar a establecer metas realistas para tus gastos. Ten un bloc de Notas Súper Adhesivas Post-it® en tu bolsa o bolsillo y anota todo lo que gastas. Al final del día, puedes pegar cada nota en un cuaderno o puedes tomarle una foto con tu teléfono para tener un historial de tus gastos.
Sobre la base de las transacciones que has registrado durante el primer mes, identifica en qué podrías ahorrar dinero. Tal vez tengas que renunciar a las comidas fuera un par de veces a la semana, eliminar tu hábito de refresco de dieta o cancelar la televisión de paga. No importa lo que elijas, debe contribuir a llegar a una meta de ahorro para el próximo mes. Escribe esa meta en una Nota Súper Adhesiva Post it® y pegala en tu cuaderno de presupuestos, en el monitor de tu computadora o en tu calendario para que no lo puedas olvidar.
Debes tener una razón para establecer metas de ahorro, puede ser pagar algunos préstamos, ahorrar para el enganche de una casa irte de vacaciones. La meta que sea, apúntala (o haz un dibujo) en una Nota Súper Adhesiva Post-it® o en una Banderita Post-it® y ponla en algún lugar que te ayude a recordar que no debes gastar dinero innecesariamente: tu billetera, tu bolsa, el tablero del coche o tu escritorio.
Cuando hayas alcanzado una de tus metas de gasto del mes, recompénsate. Elije un pequeño regalo al principio del mes y usa tu éxito como una razón para celebrar. Tal vez sea un bote de helado, la renta de una película o una botella de vino. Asegúrate de que el premio sea algo que realmente vayas a disfrutar, pero que no arruine tu meta de ahorro. Pon una Nota Súper Adhesiva Post it® el último día del mes en el calendario con tu recompensa escrita en ella para recordar lo que estás deseando.
Estos sencillos recordatorios y recompensas son una buena manera de empezar a trabajar en tu proyecto de presupuesto, así que no tengas miedo de empezar poco a poco. Incluso el primer paso es un paso en la dirección correcta.